miércoles, 30 de septiembre de 2009

El opositor miente más que habla (o canta)


Cuando iba por las biblios reclutando a nuevos compis para la chupipandi bibliotequil, si me topaba con un novato le explicaba siempre (tras las tres preguntas de rigor 1¿opositas? 2¿a qué? 3¿cuánto tiempo llevas?) que la regla number one de la oposición es saber que el opositor miente.
Se miente a sí mismo (mañana recupero los temas atrasados y me hago mil más), miente a su prepa (es que este tema se me da mal, pero me lo he estudiado) y sobre todo miente a los demás opositores.

Llevo tiempo obviando esta máxima en el blog porque, que yo (opositora) publique aqui (blog para opositores) que el opositor miente como un bellaco, pues como que no queda muy bien, pero es cierto. Está claro que no todos emulan a Pinocho, de hecho yo no lo hago, y conozco a muchos que tampoco (a los mentirosos los calo rápido y me acaban cayendo bastante mal por lo que procuro evitarlos) pero, repito, aunque quede mal que lo diga yo, muchos opositores mienten cuando se refiere a la opo.

Recuerdo cuando empecé con esto que tuve la gran suerte de tener a mi compi P. que me contaba grandes verdades opositoriles y me hacía el camino más llevadero, pero también recuerdo que cuando yo empecé también lo hizo otra, A. que a partir de ahora llamaremos "la rancia" que es el apodo que se ganó a pulso y por el que P. y yo nos referíamos a ella. Al principio vas muy perdido: el no saber estudiarte un tema, el cantarlo en media hora en lugar de quince minutos, el estrés de cantar a pelo, etc, etc. Y de vez en cuando me daba por llamar a la rancia para preguntarle cómo lo llevaba ella ya que íbamos a la par, y siempre me decía que super bien, que genial, etc, etc... Yo me sentía bastante lerda hablando con ella, menos mal que tenía a P. que llevaba dos años más que yo y me decía "no puede no ir de culo ninguna semana, tranqui que lo tuyo es normal".
Sólo sé que la rancia, al cabo de un año dejó de venir (P. y yo desistimos de intentar quedar con ella pasados seis meses de meternos trolas del palo "es que tengo médico"... sí, a las ocho de la noche, fijo) por lo que le pregunté al prepa y me dijo que la había invitado a dejar la opo. Yo me quedé a cuadros, ¡pero si le iba de puta madre! Resulta que no conseguía cantar un tema entero ni haciéndose esquemas de media hora...


También los hay que mienten al revés "voy fatal, no estudio na" o el comentario supergracioso "joder cuánto estudias" si llegas media hora antes que ellos a la bib, cuando tú sabes perfectamente que es que ellos llegan más tarde porque se acuestan con el código en la mano y hacen más horas que un reloj. Eso no mola tampoco, que ser modesto vale, pero tomar el pelo a los compis no. Luego pasa lo que pasa, que no te integras en la chupipandi y el café te lo tomas solo.

Pero mis favoritos, dejando de lado a los que dicen que estudian 16 horas diarias y cantan como los ángeles (pero luego se niegan a cantarte un mísero tema que se acaban de mirar) y los que dicen que no estudian una mierda a ver si te contagian su vagancia (mientras se saltan el café del descanso para memorizarse un artículo más), como decía, mis favoritos son en realidad los que se quitan años de opo. Estos me encantan, porque por lo visto no saben ni sumar.
Recuerdo una chica que cuando yo conocí llevaba dos años de opo, igual que yo, pasado un año, yo llevaba tres y ella seguía llevando dos, y este año, llevando yo cuatro y pico, resulta que ella llevaba.... ¡DOS! Que sí, que vale que al opositor se le para el reloj, pero esto es pasarse. Pero claro, luego te enteras de que resulta que no es que no sepan contar (que vale que muchos son de letras, pero al dos más dos deberían llegar) sino que se quitan años alegremente: es que el primer año no me puse en serio, es que el segundo año mi abuela se puso enferma, es que el tercer año me dejó el novio... y con la coña resulta que empezaron en el 2004 pero sólo llevan un par de añitos, y eso siendo generosos! jajajajaa
Si yo me tuviera que descontar años por defunciones, rupturas, enfermedades misteriosas, mudanzas, etc, llevaría un añito con la opo y no los CINCO AÑAZOS QUE ACABO DE CUMPLIR ¡¡yupi!!
Pues ya podéis felicitarme, porque no me pienso quitar ni uno, cada año ha sido una lucha, un aprendizaje, un obstáculo en el camino hacia la meta y una experiencia que me han hecho madurar y ser lo que soy... veterana jajajaja


¿Y a qué viene esta entrada? Viene a cuento de las estadísticas de opositores aprobados de la Escuela que misteriosamente se la han sacado con una media de cinco años y tres meses y sin embargo sólo 21 de los 135 son menores de 28 años... que alguien me lo explique. Si la media de edad de está en 30 años, no puede ser que todos se hayan puesto a currar antes de opositar (sabemos que ese es un porcentaje muy pequeño) y hoy en día en que mucha gente hace la carrera en 4 años no es normal que la media de edad esté en treinta si sólo se tardan cinco... La media debería ser de seis o siete años, teniendo en cuenta que los hay que se la sacan en dos y los hay que tardan diez.
Yo conozco a más gente que ha tardado más de cinco años que gente que ha tardado cuatro o menos, por lo cual la estadística sorprende... ¡pues no!
¡Porque resulta que mucho cuentan años a partir de que aprobaron el primer examen! Lo de antes fue una toma de contacto, eso no cuenta jajajaja

Compis, la opo se puede sacar en dos años, pero tiene un grandísimo factor suerte -ya no solo con las fichas sino con las circunstancias de cada uno- (además del importantísimo factor prepa y sistema de estudio del que ya he hablado en otras entradas) que para algunos juega en contra y por ello tardan varias convocatorias en salir victoriosos.
No debemos avergonzarnos de nuestras derrotas, sino aprender de ellas y seguir con confianza porque el que resiste gana, el que la sigue la consigue, sólo es cuestión de aguante. Cuánta gente lo hubiera dejado el quinto año y se empeñó hasta aprobar, cuántos hubieran tirado la toalla pensando que lo "normal" es sacársela pronto. Cuántos se han sobrepuesto a mil desgracias y han seguido estudiando sin pensar en el tiempo perdido y han cumplido su sueño...
No hagáis caso de estadísticas, tan solo de vosotros, mientras tengáis fuerza y vocación merecerá la pena seguir. La gente que conozco que ha tardado 9 o 10 años es tanto o más feliz que el que ha tardado la mitad. No os avergoncéis del camino, nunca es tiempo perdido.

martes, 22 de septiembre de 2009

Empiezan los orales (BSO)




Como la entrada de la semana pasada resultó ser un poco coñazo tediosa, esta semana toca reirnos un poco del sistema de oposición, aprovechando que hoy, 22 de septiembre, empiezan los orales... porque a mí en verdá lo que me gusta es cantarXD

Parece mentira
que después de tanto tiempo
rotos nuestros sueños
sigamos manteniendo la ilusión
en que este es nuestro año...

La misma mesita
que nos ha visto cantar
los temas por lo bajo
cuida que el programa esté a la vista
hojas y boli a mano

Y aunque la espera se acabó
no hay quien nos quite este temor
que aunque empeñados en cantar
hay temas que ni con sumial

Las fichas del saco
acabarán por revelar
qué temas te han tocado
y tendremos ganas de cortarnos la
dichosa mano

22 de septiembre:
empiezan los orales
y no sabemos si alegrarnos
o llorar desconsolados

Y aunque este año sea mejor
no hay quien se quite esta presión
que aunque empeñados en cantar
hay temas que se nos dan mal

22 de Septiembre
empiezan los orales



empiezan los orales



Quiero enviar toda la suerte del mundo a los compis que estrenan hoy el Supremo, recordarles que aunque los últimos días siempre sean caóticos y no nos cundan como quisiéramos lo que cuenta en realidad es la labor de años, no de la última semana.

Nada de retirarse al ver las fichas, luchad por la plaza, cantad como sea, si hemos de suspender que lo hagan ellos, no nos suspendamos nosotros de antemano.

Sin miedo, pensad que aprobaréis, pero si así no fuera no hay nada perdido, vienen unas convocatorias muy buenas, habrá más plazas y estarán más dispuestos a escucharnos.

Confiad en vosotros, atraed a la suerte, actuad como si la prueba no fuera más que un mero trámite y sobre todo recordad: sabéis más de lo que creéis y lo que es más importante, más que ellos.


PS: En especial muchísima suerte a mis compis J. y L. que van de los primeros y mucho ánimo a Corpus, que volverá al mundo blogger con buenas noticias.

PS2: cuando se rumoreó como fecha de comienzo el siete de septiembre me lo pusieron a huevo con MecanoXD

martes, 15 de septiembre de 2009

Sistemas de estudio


Venía yo escaqueándome hace tiempo de abrir esta entrada pero ya no me queda más remedio que hablar de los maravillosos sistemas de estudio que conducen al aprobado.
Aclaro que no pretendo ser exhaustiva: hay sistemas para todos los gustos y colores. Lo que pretendo es explicar los dos sistemas más conocidos: el de vueltas y el de arrastre, con algunas de sus variantes, también quiero recordar que cada opositor es un mundo y que lo que le funciona a uno no tiene por qué irle bien a otro, así que aqui abordaré el tema desde mi experiencia personal, que no tiene por qué coincidir con la de los demás.


EL SISTEMA DE VUELTAS consiste en estudiar todos los temas seguidos sin repasar, hasta acabar el temario e ir subiendo temas a medida que se suceden las vueltas.

Ante todo quiero precisar que según mi opinión lo peor que puede hacer un opositor es llevar el sistema de vueltas completas, o sea, a los casi cuatrocientos temas. En primer lugar porque la vuelta se alarga demasiado y después de un año y medio uno casi no recuerda el primer tema estudiado, con la consiguiente depresión de la segunda vuelta, y en segundo lugar porque de nada nos sirve tener una idea del tercer ejercicio si no pasamos el segundo por no haber machacado suficientemente los temas debido a las vueltas tan largas.
Yo seguí este sistema por lo cual llegaba al oral con vueltas de cuatro semanas (y siempre me tocaba algún tema de hacía un mes) y tampoco me sé el procesal por estudiarlo desganada viendo que se me iba olvidando la primera parte del temario (y de mercantil y admvo/laboral ni os cuento).
De hecho, con la novedad de la convocatoria que consiste en dispensar del primer oral a los que lo aprueben con nota superior a la media se confirma que este sistema es lo peor. Por lo cual a partir de ahora cuando hable de vueltas me referiré al estudio de uno de los dos orales, no de ambos.

Las vueltas básicas serían algo así (es un ejemplo, depende de la capacidad del opositor y del prepa, algunos prefieren vueltas rápidas con el contenido por los pelos y otros vueltas lentas pero los temas muy bien sabidos -yo soy de la opinión de que las primeras vueltas tienen que ser muy buenas, mejor poco y bien-):
1ª vuelta a 4 temas por semana (6 si se canta dos veces por semana) en 48 semanas
2ª vuelta a 8 temas por semana (más si se canta dos veces...) en 24 semanas

3ª vuelta a 12 en 16 semanas

4ª vuelta a 16 en 12 semanas
5ª vuelta a 24 en 8 semanas

6ª vuelta a 32 en 6 semanas
7ª vuelta a 48 en 4 semanas
8ª vuelta a 64 en 3 semanas

9ª vuelta a 95/96 en 2 semanas.
Si se canta dos veces por semana se baja mucho el tiempo de preparación y en dos años se podría aprobar el primer oral, cantando una vez por semana salen tres añitos mínimo.

Claro que si se pasa el test y uno está animado puede hacer el esfuerzo milagroso y meterse muchos más temas (echando muchas más horas) y lograr ser uno de los pocos que aprueba en poquísimo tiempo. Por eso siempre recomiendo ir al test desde el primer año (no como yo que no pude ir hasta pasados dos años y me quedé a una porque lo último que había mirado era el tercer ejercicio y la vuelta del primero me quedaba muuuy lejos). ¡Ay cuántas cosas cambiaría si pudiera volver a empezar!


El sistema de vueltas admite múltiples variantes:


-repaso por bloques: Si vamos a cinco temas por semana la sexta semana no se lleva ningún tema nuevo sino los 25 vistos, la séptima semana otra vez cinco, así hasta haber visto 25 nuevos en que se vuelve a parar, etc, y a medida que se suceden las vueltas los bloques de temas acumulados son más extensos. Muy recomendable para hacer simulacros incluso desde que se lleva muy poco tiempo de opo.

-avance y retroceso: se estudian por ejemplo cuatro temas nuevos la semana uno, la semana dos otros cuatro nuevos, la semana tres los cuatro de la semana uno de repaso y cuatro nuevos, la semana cuatro los temas de repaso de la semana dos y cuatro nuevos y así en adelante, repasando temas cada dos semanas. Yo lo seguí para el mercantil y admvo y laboral, y la verdad no me sirvió de mucho, pero claro, en esa vuelta yo estaba muy de capa caída, pero se puede caer en la tentación de no mirarse bien un tema pensando en que se repasará a las dos semanas y luego no acabar de llevarlo bien.

-repaso semanal: los temas que se tengan que mirar a la semana se repasan/estudian varias veces dentro de la semana. Así por ejemplo si llevamos 12 temas puede que en una semana los hayamos mirado tres veces, no una. El inconveniente es el mismo del sistema de retroceso, que puede que hagamos trampas y nos lo miremos sólo una, total el prepa no nos vigila los repasos sino sólo los que llevamos al cante que van a ser doce, mirados una o tres veces.

-sistema de terminaciones: en lugar de avanzar según el programa se hace por terminaciones, me explico: en lugar de llevar los temas 1-50 de civil llevamos todos los terminados en 1, en 2, en 3, en 4, en 5... que sumen cincuenta. De este modo se facilitan los simulacros ya que se llevan temas de todos los sacos, lo malo es que a veces se juntan unas terminaciones feas feas (por ejemplo si llevas los 9 y los 0 te puede dar algo: servidumbres legales, prop intelectual, los nuevos de comunitario, traición, delitos vs comunidad internacional...).
Este sistema es ideal si hemos dejado muchas vueltas a medias y siempre hay temas que hemos visto menos, de este modo se compensan los más vistos (1, 2, 3...) con los menos vistos (sucesiones, últimos títulos de penal, etc). También sirve si por tiempo hemos de pasar del sistema de arrastre al de vueltas.


EL SISTEMA DE ARRASTRE: yo lo he seguido poco, así que no puedo opinar de lo que es empezar con este sistema, ya que yo empecé con el horroroso sistema de vueltas completas pero creo que es un sistema excelente, sobre todo para dominar los temas.
¿Los inconvenientes? Es muy lento (y aburrrrrido) y parece que no avances, lo cual puede desmoralizar al opositor, si no tuviera esta pega creo que sería ideal. Lo malo es que he hablado con opositores que han llevado este sistema desde el principio y no sé cómo se lo habrán planificado sus prepas para que lleven tropecientos repasos de unos temas y otros sin tocar... eso sí que no puede ser. Que de nada sirve saberse muy bien consti si no se tiene ni idea de la segunda bola de civil, por ejemplo.

Este sistema consiste en llevar siempre todos los temas (por ejemplo: semana uno temas uno y dos, semana dos temas uno y dos y tres, semana tres temas un, dos, tres y cuatro, etc) hasta completar un bloque de X temas y entonces dejar los primeros veinte una semana y así ir alternando semana sí semana no, de modo que todos los temas estén vistos de hace quince días como mucho.

Cuando yo lo seguía, para no descompensar temas lo que hacía era ir apuntando cuántas veces (o cuantas semanas) había arrastrado cada tema, así al tema que arrastraba desde hacía cuatro semanas le dedicaba los veinte minutos de hacerme un esquema y cantarlo, ni uno más, sin embargo al tema que había visto sólo dos semanas le dedicaba más tiempo procurando verlo dos veces o más en la semana, así iba compensando el tiempo dedicado a unos y a otros.


Esta entrada es un coñazo, lo sé, lo siento pero lo prometido es deuda.

Otra cosa buena del sistema de arrastre es que para los que hemos fallado en el terreno de la seguridad, da mucha confianza, ni que sea hipotéticamente piensas "con la de veces que lo he repasado cómo no me lo voy a saber". A lo mejor con el de vueltas te lo sabes también pero no tienes esa convicción y la convicción es clave para aprobar la opo, como muchas veces repito si no nos lo creemos nosotros no se lo creerán ellos, aprueba el que demuestra que sabe, no el que más sabe.
Debemos recordarlo cada día ante el preparador y sobre todo el día del examen.

Sigamos el sistema que sigamos, lo importante es saberse los temas, conseguir verlos en dos semanas como máximo antes del examen e ir convencidos de que cantaremos nos caiga el que nos caiga.


A los que sigan despiertos a estas alturas de la entrada ¡Mucho ánimo! Llevéis el sistema que llevéis todo tiene sus pros y sus contras, quedémonos con lo bueno y para adelante, a por el aprobado, sin lamentos ya que lo que está hecho hecho está, lo único que podemos hacer es cambiar lo que ha de venir y de nada sirve perder el tiempo en reproches pasados.


Lo que sí creo que es importante es ir subiendo el número de temas cantados, de hecho al entrevistarme con mi prepa antes de empezar fue una de las primeras cosas que le pregunté, si al ir acumulando temas pasaba de preguntar uno a preguntar dos, luego tres, cuatro hasta hacer simulacros y me dijo que sí.
Creo que es clave para aprobar, probarse que se puede cantar seguido sin problemas. De hecho se lo comentaré la semana que viene que ya llevo 40 a ver si empezamos a cantar dos:) Ya os contaré;)

martes, 8 de septiembre de 2009

Love is in the air


Hace tiempo que quiero hablar del amor y las opos, del cambio con el aprobado, de la fama de Sodoma y Gomorra de la Escuela Judicial y el CEJ... pero no encontraba el enfoque. Sin embargo, al vivir este fin de semana un cuento de hadas en el bodorrio del que vengo, no podía evitar abrir esta entrada.

C y J se conocieron tras aprobar la opo y parece ser que fue tal el flechazo que J, que hasta ese momento tenía pensado ser Fiscal, en el acto de elección optó por la carrera judicial. He tenido la suerte de presenciar ese comienzo, la llegada de la pareja a Barcelona, la ilusión del principio, primero de boca de mi amiga C. (pese a la babas que se le caen cada vez que habla de J.) y después cuando quedábamos los tres para cenar el día de mi cante. Y, aunque yo creía que las mariposas revoloteaban en el estómago sólo los primeros meses, tras dos años y pico los sigo viendo igual, exactamente igual que la primera vez que los vi juntos. Sé que sonará a exageración, pero verles me ha hecho recuperar un poco la fe en el amor, que yo creía que estaba condenado a ir marchitándose poco a poco con la presión de la rutina y la comodidad de la seguridad en pareja.

Por eso me da mucha rabia cuando se habla del opositor malévolo, que deja a su pareja de toda la vida, el sufridor a la sombra porqueril, en el instante en el que pone un pie en la Escuela o en el CEF, o incluso antes, en cuanto empieza el mejor verano de su vida: el del año en que aprueba.
Y me da rabia porque no es cierto, no es el opositor que no tiene escrúpulos sino que muchas relaciones retrasan su inevitable fin gracias a la rutina opositoril y en el momento en que ésta acaba el supuesto sufridor en lugar de alegrarse de poder hacer mil cosas (aquellas por las que tanto se quejaba de tener que privarse por la oposición de su pareja) se amarga, se vuelve huraño, y quizá sin ser consciente de ello en el fondo preferiría seguir como antes, con el pobre opositor cerrado en casita y siendo él (o ella) el salvador de las horas de descanso y el pañuelo de lágrimas de los suspensos. Pues no.
El ex opositor quiere vivir, quiere disfrutar, hacer todo lo que su pareja ha podido hacer mientras él estudiaba y ansiaba llegar a compartir, y muchas parejas no se adaptan al cambio.
Y ya sabéis el dicho "renovarse o morir".

Así que ya está bien de estigmatizar al opositor aprobado, que la opo no cambia a nadie para mal y el aprobado menos, pero sí que te abre un abanico de posibilidades que antes no tenías ni el tiempo de contemplar. Pues si la pareja está bien, lo estará también después del aprobado, si la pareja se quiere, compartirá esa alegría y será el comienzo de una nueva vida juntos, como de hecho va a ser para mi amiga M. que ha aprobado y se casa con su novio. El aprobado no rompe parejas, sólo pone de manifiesto una ruptura que se ha venido postponiendo a fuerza de cantes y convocatorias.

Me hacía gracia (toda la gracia que te puede hacer cuando rompes una relación de seis años) cuando la gente me decía "en medio de la opo, qué valiente". No fue valentía, dio la casualidad de que de repente vi muy claro que mi problema de pareja no era la opo, la opo había sido la excusa a todos nuestros males, ocultando que no era la persona con la que quería pasar el resto de mi vida, y tampoco mis años opositoriles, mejor sola que acompañada y aburrida... y pa que se aburra un opositor tela.
Pero otras veces el opositor no lo tiene tan claro, y nadie lo puede culpar por darse cuenta cuando aprueba de que esa persona no es la acertada... peor sería continuar por que sí porque, no nos engañemos, el aprobado no se lo debemos a nuestra pareja. ¿Que nos apoya? Sí (la mayoría), pero nosotros también los apoyamos en el trabajo, en las relaciones familiares, en los problemas que le van surgiendo y no por eso firman un contrato de por vida y ellos no se lo piensan dos veces en cortar por el hecho de estar opositando, ¿entonces por qué deberíamos hacerlo nosotros? Opositores sí, pero mártires no, y el amor no entiende de opos ni de aprobados.


Para mis amigos C. y J. lo mejor de aprobar no ha sido la plaza, ha sido haberse encontrado y perderse en los ojos del otro cada vez que se miran.
El aprobado no lo es todo, es sólo una de las dos salidas a la oposición y una de las entradas a una vida con más libertad y con todas las opciones que se tienen a partir de entonces, en todos los terrenos, y entre ellos, por supuesto, en el de cupido. Todo pasa por una razón. Mi amiga C. podría haber aprobado el año anterior, en que le cayó uno de los cinco temas de procesal que se había dejado y ahora sabemos que ese aprobado hubiera sido una desgracia, jamás hubiera conocido a J. y jamás habría vivido el día más feliz de su vida, y yo, en la parte que me toca, no podría haberlo compartido con ellos.

Ánimo compis, luchemos a muerte por nuestra plaza, pero no porque sea la clave de la felicidad, la felicidad no la da el trabajo sino las personas que nos rodean, luchemos por ella para tener el tiempo de disfrutar de ellas.

Esta entrada se la dedico (yo ya dedicando, como los artistas jajajaa) a D&A que también están viviendo su cuento particular, un cuento en que un viaje a Benidorm acaba siendo un paseo en góndola y donde una cajita polvorienta esconde una promesa para toda la vida.
Ayy, que me pongo tierna.

jueves, 3 de septiembre de 2009

Me encanta que los planes salgan bien


Estoy SUPERFELIZ! Ayer fui a cantar y no podía parar de sonreir, el prepa debe pensar que voy bebida o algo, pero no, y no es que fuera con los temas requetemachacados y sobradísima, ¡es que había acabado la vuelta! Parece una parida pero a mí me da un subidón increíble (a mí y a los temas, que voy a doblarlos CASI). Y estaba contenta porque estaba orgullosa de mí misma.
El prepa me cambió el día de martes a miércoles el martes mismo, y yo, en lugar de seguir repasando para ir el miércoles con los temas perfectos me hice los 5 temas colgados que me quedaban para acabar la vuelta. Claro, fui sin el repaso reciente de los temas y justamente (qué ojo tiene el joío) va y me pregunta uno de los más lejanos, pero aún así no fue mal y me compensa más un cante decente y la vuelta acabada que un cante extraordinario y la vuelta sin acabar por cinco temitas de na.

Además este finde me voy a una boda (¡¡¡qué ganas!!!! ¡mi única salida en todo el verano! jajaja) por lo que entre pitos y flautas sólo tengo tres días y medio para estudiar hasta el siguiente cante. Al contárselo al prepa me dice, si quieres no vengas y aprovechas el martes para estudiar... ¡Pero no! Ya lo tenía todo calculado desde que me hice el planning post test y esta semana llevaré 31 temas y ya en las siguientes 40, y en cinco semanas acabo otra vuelta. No os podéis imaginar la satisfacción de tenerlo todo bajo control, de saber exactamente lo que vas a hacer y cómo y no dejar nada a la improvisación.

Repito, no voy bebida ni tampoco drogada (ya no me tomo ni el denubil), sólo estoy feliz, feliz, feliz, con ganas de avanzar y de afianzar temas, de cerrar vueltas y de acortarlas hasta poder acumular los 191 que tenemos que sabernos para el examen.

Vale, este año para el oral me tomaré una tila, a ver si me voy a descojonar ante sus Señorías con tanto éxtasis opositoril, pero prefiero esto a los chungos de "no puedo no puedo" o "no llego no llego" de cada año. ¡Venga compis, a estudiar con una sonrisa en la cara, es gratis y allana el camino!